Vistas de página en total

jueves, 16 de julio de 2020

HISTORIA DE UN CIRUELO.

Ya dije que la vida de cada quién está hecha de " sucesos mínimos". 

Los sucesos mínimos son como las miguitas de pan que deja nuestra particular memoria de las cosas,  que las ha dejado aquí y allá, y que años más tarde las recogemos al reclamo de algo.

No hay nada más alegre que encontrarnos ese recuerdo y sus rostros.

En este tiempo de jubilación, mientras ando por bosques y rutas hacia ninguna parte, tengo muchos recuerdos , migas que encuentro, muchos acaeceres y anécdotas, unas graciosas y amenas , otras amargas, tristes, inciviles. Incluso sucias y disparatadas.


Son " historias mínimas".

Hoy recordé a Josep P. No daré nombres. Este chaval, entonces de quince años era muy guasón y bastante zumbado. Se le ocurrían cosas un poco...¿ cómo lo diría?...resumiendo, estaba como una cabra.

Tenía un agujero en el bolsillo del pantalón y no se le ocurre otra cosa que ponerse la minga, el varonil miembro erecto, saliendo por el agujero. 

Y aparece en clase con los dos brazos cargados de libros y le dice a un profesor muy piadoso, entregado a Dios en celibato apostólico , “oiga, Don Zutanín, ¿sería tan amable de sacarme el bolígrafo del bolsillo que yo no puedo?”. Lejos estaba aquel hombre, numerario generoso y apostólico, pensar con qué se iba a encontrar en aquel bolsillo.

Muy amablemente Don Zutanín introduce su mano en el bolsillo del urco y capta, alucinado que, o el boli es de Blandy Blú, o que lo que está tocando es un pepino. El ciruelo,vamos.

La clase, que estaba al tanto de la broma, se despiporra viendo la cara de perplejidad, asco, y estupor santo de nuestro hombre .  Aplauden, y hacen la ola…Y al jambo le mandaron de patitas a la calle por guarro.

Otro día, más.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

LA SEGURIDAD NO EXISTE

La seguridad no existe. Ni está en la vida, ni en la Naturaleza, ni es experimentada por nadie. Esa lección la hemos aprendido, ¡ y d...